Pandæmonium: El Principio del Fin (Neuraska Produccions y GH Records, 2020)
Hay proyectos musicales cuya razón de ser se basa en la interpretación en vivo. En la poesía musicalizada y en el spoken word, los recitales y performances son la ocasión perfecta para disfrutar de todas las dimensiones de la obra: las imágenes que acompañan a los sonidos y palabras, la presencia y carisma de los propios poetas y performers, todo ello junto a la improvisación que surge por la inspiración y por la relación con el público…
Es el caso de Pandæmonium, las actuaciones a cargo de Anton Diefebus de Estigia y Epi Neuraska suponen la mejor forma de entrar en contacto con la esencia del proyecto. De sopetón, con toda su parafernalia audiovisual y sin saber qué es lo que te vas a encontrar. Aquí están, en plena vorágine de su actuación en el festival Emergencia Sonora de 2018:
Pero a veces la realidad conspira de maneras sutiles y ofrece otras alternativas para que el mensaje llegue e impregne a través de otros canales. Y en este caso, con la pandemia como nota de miedo persistente y presente en la mente colectiva, la publicación del primer (y probablemente único) álbum de Pandæmonium llega como un aviso premonitorio que podemos experimentar y asimilar de una manera más individual e introspectiva…
Cinco elementos
El Principio del Fin cuenta con cinco temas (Terra, Aqua, Aer, Ignis, Aether) que recogen el ambiente apocalíptico del directo. En Terra e Ignis reina la oscuridad devoradora y el caos demoníaco. Diefebus se dirige directamente al oyente y lo implica, como un profeta que advierte a su rebaño de la corrupción reinante y de la tragedia inminente. Podéis reíros de estos poemas, advierte con tono ominoso, pero ello no evitará que acontezca el fin inevitable de esta sociedad enferma, el alzamiento del hambre rabiosa y ciega que guiará a los desposeídos.
En Aqua y Aer, el discurso se vuelva más intimista y relajado; hallamos dos ejercicios de introspección que apelan al espíritu luciferino para reclamar la fuerza de la voluntad necesaria en una vida digna de ser vivida, por encima de «los amos de las marionetas».
Los poemas de Diefebus son realzados por las notas gruesas, industriales y reverberantes de Epi Neuraska, a las que acompañan las grabaciones de campanas, el chisporrotear del fuego, etc., que enfatizan la temática de cada composición.
Aether cierra el disco con un giro a una ambientación más electrónica y bélica. La percusión ruda e insistente, acompañada de los samplers de armas de fuego, se adueñan del tema. El discurso se simplifica, surge la voz de los totalitarismos y se muestra la manipulación de los patriotismos y de las emociones de las masas.
Surgido del inframundo
El Principio del Fin ha sido masterizado por JJ Doc (Col·lectiu Camí Fondo) en los cuatro primeros temas, y por Artax (AR.K.) en el último. La publicación corre a cargo de Neuraska Produccions y GH Records, en formato CD con una cuidada presentación y una limitada serie de 66+6 copias.
Pandæmonium fascina con su teatralidad negra y profética, inserta en el entorno cotidiano y en la tragedia del momento. Escuchar El Principio del Fin y dejarse llevar a su Valencia apocalíptica, antesala de la capital infernal de Milton, aporta sin duda más luces que sombras.